G2A Twitch Class

Hoy, los videojuegos ya son uno de los principales entretenimientos de los nativos digitales. Según datos de AEVI, más del 75% de los jóvenes entre 6 y 24 años juegan a videojuegos en España en 2021. Y no sólo niños, según este estudio, 18 millones de españoles juegan a videojuegos, con una media de 8h semanales.

Estos datos nos demuestran que el gaming está presente en la sociedad y especialmente en los más jóvenes. A su vez, las posibilidades de socialización y ocio que ofrecen los videojuegos suponen nuevos retos para padres y educadores: ¿a qué dedican realmente el tiempo los niños y adolescentes? ¿en qué están invirtiendo realmente su dinero? ¿con quién interactúan en los videojuegos?

La brecha generacional entre ambos grupos ahora puede estrecharse rápidamente si prestamos atención al seleccionar el videojuego y a algunos parámetros concretos, tal y como ya han observado numerosos educadores. Además, los videojuegos no sólo están en la esfera de los hogares, durante los últimos años la inclusión de las nuevas tecnologías en las aulas ha ido in crescendo.

Abarcando desde la educación infantil hasta la universitaria e incluso la formación profesional más práctica. Cada día salen al mercado nuevos juegos diseñados para el aprendizaje (los llamados serious games o videojuegos serios), enfocados al desarrollo de habilidades específicas como la precisión, concentración o memorización. Pero estos no son los únicos con potencial para ser incluidos en las aulas o para extender el aprendizaje a nuestros hogares: los juegos más atractivos para niños, adolescentes y adultos ofrecen igualmente oportunidades para el enriquecimiento y desarrollo personal.

Las ventajas de títulos tan populares como Minecraft son claras, como apuntan numerosos estudios y aplicaciones didácticas, incluyendo el estímulo de la creatividad, resolución de problemas y la cooperación. Estos elementos, junto con nuevas tendencias como el metaverso o la proliferación de academias extraescolares para niños de programación de videojuegos nos dicen que es necesario prestar atención especial al videojuego; tanto desde el rol de padre o educador como en el uso formativo del gaming.

Pero es cierto que no todo vale. Para guiarnos y poder analizar lo adecuado de cada juego para niños y adolescentes, tenemos varios recursos disponibles que nos permiten conocer el público a quien van dirigidos. En primera instancia, contamos con el llamado Código PEGI (Pan European Game Information), que presenta una clasificación por edad para cada videojuego, en etiquetas claramente visibles tanto en formatos físicos como digitales.Asimismo, una medida para evaluar y acompañar a los más jóvenes en su afición se basa en la aplicación de nuestro propio criterio: involucrarnos en sus actividades de ocio nos permite acercarnos tanto a los contenidos que consumen como a sus intereses, lo que es un factor clave en la creación de lazos sociales.

En otras palabras, dedicar tiempo al ocio de nuestros hijos o alumnos nos ayuda a entender qué retos los cautivan y qué implicaciones tiene, por ejemplo, apagar una consola en mitad de una partida. Para seleccionar el juego adecuado, vemos nuestra tarea facilitada por diferentes webs que ofrecen información detallada, como es el caso de G2A.COM, uno de los marketplace más grandes de videojuegos y productos digitales del mundo.

Adicionalmente G2A España ha lanzado una iniciativa para ayudar a los padres y educadores a entender mejor a los menores en colaboración con TwitchClassEdu. TwitchClassEdu (Carlos Lopez Gil) es un profesor que ayuda a sus seguidores a hacer más interesantes las matemáticas y la educación en general gracias a los videojuegos, como por ejemplo podemos aprender a calcular la hipotenusa a partir del salto que realizamos desde una superficie elevada hasta el suelo en un videojuego.

G2A y TwitchClassEdu, en colaboración con Play The Game Agency, realizarán contenido en el canal de Twitch de este último (https://www.twitch.tv/twitchclassedu) durante septiembre aprovechando el momento de la vuelta cole. El objetivo de estos contenidos es ayudar a los espectadores del canal (tanto jóvenes como padres y formadores) a ver el lado útil de los videojuegos. Y no sólo hablamos de contenidos prácticos enfocados a las matemáticas, sino de otros contenidos más generales para ayudar a adultos a entender y aprovechar las oportunidades de los videojuegos.

En pleno siglo XXI, toda la información que necesitamos está a nuestro alcance y, con ello, la posibilidad de convertirnos en mejores educadores y modelos a seguir. Podemos aprovechar las oportunidades que nos ofrecen los videojuegos tanto para aspectos prácticos (aprender matemáticas como hemos visto antes), pero también podemos desarrollar la motricidad con juegos de danza, o aprender inglés con cualquier juego de aventuras y crear lazos compartiendo misiones e idear actividades formativas específicas. Las perspectivas de crecimiento de la industria de los videojuegos solo van en aumento, pero depende solo de nosotros integrar sus posibilidades educativas, sociales y profesionales en nuestro día a día.